"Car il y a plus d'analogie entre la vie instinctive du public et le talent d'un grand écrivain, qui n'est qu'un instinct religieusement écouté, au milieu du silence imposé à tout le reste, un instinct perfectionné et compris, qu'avec le verbiage superficiel et les critères changeants de juges attitrés... Ainsi s'étaient succédé les partis et les écoles, faisant se prendre à eux toujours les mêmes esprits, hommes d'une intelligence relative, toujours voués aux engouements dont s'abstiennent des esprits plus scrupuleux et plus difficiles en fait de preuves. Malheureusement, justement parce que les autres ne sont que de demi-esprits, ils ont besoin de se compléter dans l'action, ils agissent ainsi plus que les esprits supérieurs, attirent à eux la foule et créent autour d'eux non seulement les réputations surfaites et les dédains injustifiés mais les guerres civiles et les guerres extérieures, dont un peu de critique port-royaliste sur soi-même devrait préserver."
Marcel Proust (le narrateur)
"... tengo la convicción de que el noventa por ciento de la gente que ahora me escucha sabe mucho más de literatura que yo. Soy lo que podríamos llamar un lector selectivo, esto quiere decir que sólo leo lo que me gusta y nada más" (p. 16).
"... Arlt me advirtió: 'Yo salgo a comprar libros por la calle Corrientes y me basta hojearlos para saber si vale o no la pena comprarlos. Y nunca me equivoqué" (p. 19).
"... a causa de que los periodistas no traían el prometido material antes de la hora del cierre, tuve que inventar, para llenar espacio, muchos cuentos o fragmentos críticos que atribuía a escritores inexistentes" (p. 20).
"... estaba escribiendo una novela 'genial'... que nunca llegó a publicarse, tal vez por mala, acaso simplemente, porque la perdí en alguna mudanza" (p. 29).
"Arlt era un artista (me escucha y se burla)" (p. 31).
"Arlt es un gran novelista. Pero odia lo que podemos llamar literatura entre comillas... Comprendí que resultaría inútil, molesto, posiblemente ofensivo hablar de admiraciones y respetos a un hombre como aquél, un hombre impredecible que 'siempre estaría en otra cosa'" (p. 32).
"'Pero mirá, un tipo que es capaz de escribir en serio una frase como ésta', y venían la frase y la risa. Pero las burlas de Arlt no tenían relación con las previsibles y rituales de las peñas o capillas literarias... No atacaba a nadie por envidia; estaba seguro de ser superior y distinto, de moverse en otro plano" (p. 34).
"En aquel tiempo, como ahora, yo vivía apartado de esa consecuente masturbación que se llama vida literaria. Escribía y escribo y lo demás no importa" (p. 35).
"Pérez Ensina dijo: 'Cuando estrené La casa vendida...' Entonces Arlt resucitó de la sombra y empezó a reír y siguió riendo..." (p. 35).
"Hablo de arte y de un gran, extraño artista [Arlt]. En este terreno, poco pueden moverse los gramáticos, los estetas, los profesores. O, mejor, pueden moverse mucho pero no avanzar... Hablo de un escritor que comprendió como nadie la ciudad en que le tocó nacer" (p. 38).
"... ésta es una de las muchas diferencias que me distinguen de George Bernard Shaw. Aparte, claro está, del talento. Hay obras de Shaw cuyos prólogos o epílogos son tan valiosos como la comedia correspondiente, o la superan" (p. 40).
"Su ocupación preferida? Leer novelas policiales... Sus autores preferidos? La Biblia, Faulkner, Proust, Céline, Dostoievski, Cervantes, Hemingway. El pájaro que prefiere? El gorrión" (p. 85).
"No sacrifiquen la sinceridad literaria a nada. Ni a la política ni al triunfo. Escribir siempre para ese otro, silencioso e implacable, que llevamos dentro y no es posible engañar... No se limiten a leer libros consagrados. Proust y Joyce fueron despreciados cuando asomaron la nariz, hoy son genios... No desdeñar temas con entraña narrativa, cualquiera que sea su origen. Robar si es necesario. Mentir siempre" (p. 87).
"Siempre dije que los críticos son la muerte; a veces demoran, pero siempre llegan" (p. 89).
"... como escritor puedo decir que mi reino no es de este mundo" (p. 89).
"... conocí a un grupo de adolescentes que empleaba con naturalidad la palabra tarúpido, telescopeada de tarado y estúpido. Juro que no habían leído a Joyce... el término no procedía para ellos de necesidad literaria alguna sino de un respetable afán de velocidad y síntesis... Dejemos de lado, porque carecen de interés para el escritor, la semántica o el estructuralismo" (p. 90-91).
"Lo malo del asunto es que casi todo el mundo escribe novelas geniales. Pocos intentan construir buenas novelas" (p. 92).
"Mi principal fuente literaria, en la infancia... fue el Eclesiastés. Hasta hoy no me lo refutaron de manera convincente" (p. 93).
"No se trata directamente de inculpar a Cortázar y compañía" (p. 96).
"Yo escribo por ataques" (p. 98).
"El hombre debe crearse ficciones religiosas" (p. 99).
"Yo no tendría interés de escribir si supiera de antemano lo que va a pasar en mis obras" (p. 99).
"... En busca del tiempo perdido importa más que todo lo que se ha escrito en hispanoamérica desde hace un siglo y medio" (p. 100).
"Mi obra sería infinitamente más amplia y rica si yo me sintiera capaz de someterme a una disciplina" (p. 100).
"La paz es necesaria para el escritor... Es malo estar angustiado por lo que pasa cada día... lleva a dos posturas: o cruzar-se de brazos... o caer en el panfleto" (p. 101).
"Para mí, escribir es como um vicio, una manía" (p. 101).
"Tengo la sensación de no haberme estafado a mí mismo ni a nadie, nunca" (p. 101).
"Nunca escribí para pocos o muchos; siempre escribi para mí" (p. 102).
"El escritor no desempeña ninguna tarea de importancia social" (p. 104).
"No me interesan los novelistas como Robbe-Grillet" (p. 105).
"A los europeos les gusta el colorido tipo Asturias, pero a lo que es universal, como Cortázar, no le dan calce. Como si ese campo se lo reservaran solemente para ellos" (p. 105).
"Creo que la poetización deliberada [de la prosa] lejos de ser un hecho positivo es indigna. La novela muere" (p. 107).
"Roberto Arlt es el último tipo que escribió novela contemporánea en el Río de la Plata, el único que me da la sensación del genio. Si me ponen entre la espada y la pared para que señale una sola obra de arte de Arlt, fracaso. No la hay. No existe. Tal vez por un problema de incultura, pero Arlt no conseguía expresarse, nunca logró una obra organizada" (p. 108).
"... los personajes, creo que nacieron de los fantasmas que son puertas, que pueden ser atravesadas para confesiones parciales" (p. 110).
"La influencia de Faulkner es indudable" (p. 111).
"... hay un consejo que anda por ahí y es que no conviene contar el argumento de una novela que estás escribiendo. Es una supertición: el que cuenta el argumento, después no lo escribe más. Pero esto no sé si ponerlo como superstición o como hecho" (p. 134-35).
"De todas maneras, estoy de acuerdo contigo, y con Cortázar y con Sarduy y tutti quanti, que el medio de expresión del escritor es el lenguaje. Pero... el lenguaje no es una cosa exclusiva del escritor. Para volver a citar a Borges, un día leí que había dicho en algún lado que su mayor ambición literaria era escribir una frase que pasara a ser de todos..." (p. 157).
"... la novela policial exige un tipo de técnica que no puede ser nunca, nunca, superado o bastardeado o encubierto por belleza literaria alguna" (p; 171).
"La mayoría de las cosas que yo he escrito han comenzado por una imagen, una imagen que no tenía sentido ninguno. Y me causó mucho placer un reportaje a Faulkner, cuando, al hablar de una obra suya... dice que conenzó con una imagen..." (p. 198).
"... yo, que me paso devorando novelas policiales..." (p. 198).
"Yo creo que todas las filosofías son 'cuentos chinos'; me quedo con Schopenhauer" (p. 200).
"Me atrae una trama que se desarrolla y me despierta curiosidad sin exigirme participación [novelas policiales]" (p. 211).
"Soy muy chismoso, yo" (p. 212).
"La muerte. La muerte es una cosa que me indigna" (p. 216).
****Juan Carlos Onetti, Miscelãnea. Obras completas XII (Galaxia Gutemberg, 2013).
See also:
-
Manuel Puig & la cara de Juan Carlos;
-
Leonor Acevedo Suarez: la Madre;
-
Cinema of Uruguay (Pablo Stoll);
-
Montevideo & Colonia del Sacramento;